Siempre que podemos, tratamos de recordaros la importancia que debe tener la luz natural en vuestras casas. Sin embargo, en esta ocasión le dedicaremos uno hueco para hablar un poco de luz artificial y, más concretamente, de las Akari Light Sculptures.
En 1951, el diseñador japonés afincado en EEUU. Isamo Noguchi, creó una serie de lámparas de papel mundialmente conocidas como Akari Light Sculptures. Desde entonces, estas lámparas fabricadas en papel shoji tradicional se han convertido en todo un símbolo en el mundo del diseño.
Como explica su creador, con estas lámparas de papel «la crudeza de la luz eléctrica se transforma, gracias a la magia del papel, en la luz de nuestros orígenes: el sol.» Y es por ello, por lo que Noguchi dominó a sus creaciones con la palabra japonesa Akari, que la traducción al japonés es luz y liviano. Gracias a sus lámparas, se ha convertido en uno de los diseñadores más influyentes del siglo XX.
Estas lámparas combinan diseño escultórico y funcionalidad. Dos elementos inseparables en la obra de este diseñador. Podemos ver que , a lo largo de su carrera, el bambú y el papel son imprescindibles para sus creaciones. Esto materiales, baratos y ligeros, son perfectos para moldearlos. Además, son excelentes para la iluminación ya que son reflectantes.
En la actualidad, hay mil tipos de «Akari Light Sculptures» fabricadas por un montón de marcas del sector, ni el gigante sueco se ha podido resistir a crear su propia versión de lámparas de papel. Su diseño y, sobretodo, su funcionalidad nunca dejarán que pasen de moda.